Si necesitas una impresora que sea muy precisa y que además tenga una gran resolución, la gama HR2 de Sato tienen todo lo necesario para ocupar ese vacío. Y es que gracias a sus características podemos hacer etiquetas de un tamaño muy pequeño totalmente legibles y duraderas.
Porque su cabezal nos llega a imprimir etiquetas de hasta 56 milímetros de ancho, pero su resolución puede llegar a alcanzar los 609 ppp. Lo que nos permite imprimir texto o códigos de barras en 2D de forma nítida y con una calidad sin precedentes, lo que es ideal para etiquetas destinadas a la joyería, electrónica o dispositivos de consumo entre otros.
Y aunque sea una impresora de etiquetas industrial su diseño es compacto, pero robusto y duradero. Con un rebobinador interno y un dispensador integrado. Que además nos permite cargar todas nuestras etiquetas de manera rápida y sencilla, además su pantalla se ve de maravilla para facilitarnos todo el proceso.